Diciembre 1994:
Acto de fin de año en el colegio, voy a pasar a primero básico y preparamos una obra sobre la contaminación. Niños y niñas son animales, bichos y plantas. Algunos papás son monstruos de la basura. Tengo puestas unas alas de muchos colores que me hizo mi mamá con papel celofán y alambre. Me siento bonita. Mayo 2000:
Camino de vuelta del colegio a mi casa y me encuentro con mi hermana. Dice que hay un caos en la casa porque la mamá recibió una carta del norte. Cuando llego, mi mamá no habla, sólo llora. Le pregunto qué pasó, pero sé que no me dirá porque son cosas de adultos. Ella no sabe que mi hermana ya me contó. Odio este día. Enero 2007:
Ailéen se va mañana a Suecia y sé que no la voy a ver más. Hablamos mientras termina su maleta, como hacemos desde chicas, por horas. Hace mucho frío en Santiago y ha comenzado a nevar, lo que me da más pena aun. Abril 2011:
Estamos escuchando las presentaciones del taller de proyectos culturales y hay un chico muy interesante que habla sobre hacer un gran juego usando la ciudad como tablero. Me decido a hablarle. Agosto 2012:
Con Felipe vamos a buscar un gato al refugio de Laguna verde. El primero. Vemos uno amarillo con blanco que es muy juguetón pero hay otro en el suelo que está agonizando. Lo llevamos con el veterinario y al volver el amarillo ya no está. Elegimos a otra, oscura y misteriosa. Cuando ya nos vamos aparece el amarillo. No podemos decidir y nos llevamos a ambos. A Iñáki no le gusta la idea. Enero 2014:
Son las 7 a.m. Es la primera entrevista del día a una de las mujeres que quisieron contarnos su historia sobre la dictadura. Mientras desayunamos nos cuenta lo que vivió en su detención y en la Cárcel del Buen Pastor. Me cuesta lidiar con su entereza y mi fragilidad. Enero 2015:
Tengo que desempacar las cajas de la mudanza por doceava vez. Esta vez lo haré todo yo sola. Junio 2016:
Voy viajando a Madrid. Jamás había viajado sola ni tan lejos. Jamás había tenido tanta pena. Pero, como dijo la Nico que pasaría, me subo al avión y las ciudades se vuelven puntitos, los puntitos, escarcha, y la escarcha se borra con el mar. Octubre 2016:
Llego a casa de mi tía en Holanda. Es la primera vez que conozco a Ainoha, Ainhara y Aurelia, sus tres pequeñas hijas. Nuestra mezcla de sonidos, muecas, inglés, español y holandés funciona. Nos entendemos de inmediato. Diciembre 2016:
Volvemos de un cumpleaños en la casa de un amigo. Yo no tengo sueño pero él parece cansado y enojado. Pone música en el computador y revisa sus redes sociales, me habla y no lo escucho. Me acerco y le doy un beso. Me río porque hace años que tenía ganas de hacerlo y al final era mucho más simple de lo que pensaba. Yo sé que él se ríe porque piensa parecido.