Octubre 1995:
Me han salido sarpullidos. Me llaman «cara de mermelada». Octubre 1998:
Veo al equipo femenino de gimnasia y decido que quiero seguir haciendo el spagat a los sesenta años. Mayo 2004:
Apruebo el examen de gimnasia. La única forma de evitar que me sigan haciendo mobbing un año más en la secundaria. Julio 2009:
Estoy en el arcén de una carretera en medio de Islandia y extiendo el pulgar algo insegura. Febrero 2010:
Un hombre deja a su novia. Por primera vez en mi vida siento que ese hombre es mi padre. Noviembre 2010:
Me convierto en la amante. El silencio casi me desgarra. Me juro a mí misma que jamás volveré a negar mi amor. Julio 2011:
Bailo desde lo más profundo de mi corazón. Septiembre 2011:
Me enamoro a primera vista. Me siento como si me hubieran tocado por primera vez y hubiese recuperado la inocencia. Cuando llego a casa, mi compañero de piso me obliga a acostarme con él. Junio 2011:
Mi profesor de canto dice que por primera vez me ha escuchado cantar de verdad. Septiembre 2012:
Llueve a raudales. Voy vagando muy cargada entre la maleza de un bosque sueco y me siento más segura y protegida que nunca. Cuando finalmente encontramos el pequeño lago, Hanna y yo nos bañamos desnudas. Sí, creo que me siento bien en este mundo.